febrero de 2012
número 4
María Barral Gil
Alumna de 3º ESO
¿Por qué? Ay... que cuestión tan simple y tan difícil de responder. La planteamos siempre, una y otra vez. No la hacemos de forma retórica, aunque sabemos que no tendremos respuesta. Y sin embargo nos da igual, nos descargamos usando estas palabras, como si la culpa fuera de ellas. Y ¿por qué nos peleamos tanto? Y ¿por qué nos inventaron? Y ¿por qué nos enamoramos? Y ¿por qué no podemos cambiar lo que está hecho? ¿Por qué nos obligan a estar dormidos para soñar? ¿Por qué mis sueños no se cumplen? ¿Por qué no sabemos apreciar todo lo que tenemos? ¿Por qué no cuidamos a nuestro planeta?
Y sigo preguntándome una y otra vez: ¿por qué no quieres volver a mi lado? ¿Por qué no enamorarnos? ¿Por qué no puedes saltarte las normas y eso de que el tren solo pasa una vez?
Pero sobre todo, con el rostro bañado en tristeza, no me paro de plantear, mientras me arrepiento de aquello: ¿por qué te hice daño? ¿Y por qué llora mi corazón?
Y odio conocer este porqué. Y lo peor es saber que no puedo cambiar lo que hice. Y lo peor es saber que nunca más me vas a querer igual.
ISSN: 1988-9607 | Redacción | www.iesseneca.net |