Problemas medioambientales

Actualmente existe dos grupos de problemas medioambientales causados por el ser humano: los que se producen por la sobreexplotación de los recursos naturales, como son la tala indiscriminada de árboles, la extracción masiva de petróleo, el uso irracional del agua…; y los que surgen de la contaminación del agua, el aire y el suelo. En conjunto, todos ellos traen consecuencias como la pérdida de la biodiversidad, la alteración de ecosistemas; y especialmente el segundo grupo ocasiona cambio climático global y la degradación de la capa de ozono.

Últimamente los gobiernos no se muestran muy protectores del medio ambiente; si bien promueven medidas de reciclaje o similares, no hacen nada por evitar el consumo indiscriminado de recursos naturales, a la vez que a penas se toman medidas contra la contaminación en general, ya sea por la industria, la agricultura…

Los países, cada día más, promueven la tala de árboles o la extracción de petróleo prácticamente sin control. Por ejemplo, actualmente en Brasil se pretende aprobar una ley que permita deforestar un terreno del Amazonas equivalente a Alemania y Austria juntas, lo que provocaría un impacto ambiental enorme, como la pérdida de un gran ecosistema, la muerte de muchos seres vivos tanto animales como vegetales, la expulsión de tribus indígenas y sobre todo la contaminación indirecta que eso causaría, ya que los árboles actúan como “filtro” del aire, y si toda esa zona de deforestase, aumentaría la contaminación ambiental el equivalente a lo que contamina cinco veces EE.UU. en un año. Y todo esto para ganar dinero y recursos naturales, pero a un precio desproporcionado. Algo parecido pasa con el petróleo, cuya industria potencia los conflictos armados, sobre todo por la zona de Arabia y norte de África; lo que de nuevo supone un gran precio por un bien del que prácticamente dependemos hoy en día, llegando a costar incluso vidas humanas.

Si los gobiernos por sí solos no hacen nada para evitar la pérdida de ecosistemas y recursos naturales o frenar la contaminación, somos los ciudadanos los que debemos actuar. Ya no sirven solo las medidas a nivel doméstico, pues es inútil reciclar si por otro lado se sigue contaminando o deforestando, así que debemos ser nosotros los que promovamos medidas a favor del medio ambiente. En continuación con los ejemplos anteriores, en Brasil (y en todo el mundo) se están recogiendo firmas para derogar la ley que permita la deforestación de esa zona del Amazonas. Si del mismo modo los ciudadanos hacemos protestas, recogidas de firmas, etc. podremos concienciar a los gobiernos de los problemas reales medioambientales y que así se tomen más medidas de carácter ecológico, como el cobro de multas por contaminación excesiva de la industria, la reducción de las emisiones contaminantes, disminución del consumo de recursos naturales, instalación de filtros industriales de polución…

De todos modos, hay un gran problema con esta solución, y es que si se están explotando de manera exagerada los recursos naturales es porque los necesitamos, o mejor dicho, porque dependemos de ellos. ¿Qué pasaría si de repente dejásemos de extraer petróleo? ¿Y si no tuviésemos combustibles para los automóviles? ¿Y si dejamos de talar árboles, de dónde sacaremos papel, cartón, material para nuestros muebles…? Exacto, no tendría sentido parar su explotación actualmente; al igual que no podemos pretender que la industria cese sin más su contaminación, ya que es necesaria para producir bienes hoy en día. Es ahí donde entran las medidas a nivel doméstico: tenemos que abandonar, al menos en parte, la dependencia de algunos recursos como el petróleo para que pueda dejar de explotarse en una medida excesiva, para ello debemos ir utilizando cada vez menos energías como la luz, usar paulatinamente menos los automóviles… A la vez que se promueve el reciclado y la reutilización de materiales y el menor uso de productos químicos, que causan la contaminación del suelo y de las aguas.

Y ya, fuera del ámbito doméstico, debemos promover la investigación de nuevas formas de energía (ya que podríamos idear formas de sacar mayor partido a las energías renovables, que no son tan rentables como la nuclear o la térmica, por lo que deberíamos prestar especial atención a la investigación y desarrollo de fuentes de energía como la eólica, solar, hidráulica…) y el uso de materiales sintéticos que no impliquen la extracción masiva de recursos y el empleo de materias primas (como ocurre en la industria maderera)

De este modo, no solo reduciríamos la dependencia y el consumo de los recursos, sino que disminuiría en gran medida la contaminación ambiental y la destrucción de ecosistemas.

Es así como a largo plazo acabaríamos con gran parte de los problemas medioambientales, pero es imposible tomar estas medidas sin la concienciación de la ciudadanía. Son de vital importancia los actos como la utilización menor de los automóviles, la energía eléctrica y también los productos químicos, al igual que emplear más a menudo bienes reciclados y reutilizados, mientras que se intenta que los gobiernos creen y promuevan leyes en defensa del medio ambiente y al mismo tiempo la investigación de nuevas formas de energía menos contaminantes y el desarrollo de las existentes.

Para ampliar:
http://www.solociencia.com/ecologia/06020947.htm
http://thefxmedia.com/soluciones-ambientales.html
http://1eso.wordpress.com/2009/05/15/119/
http://www.slideshare.net/SmileCompany/soluciones-a-los-problemas-medioambientales
http://ar.answers.yahoo.com/question/index?qid=20091003060728AAt9cRD
http://www.greenpeace.org/espana/es/Trabajamos-en/Bosques/Amazonia/