SÉNECA DIGITAL

Revista digital del IES Séneca


junio de 2015

número 5
ISSN: 1988-9607
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ENTREVISTA A ANTONIO CARVAJAL

Equipo de Redacción: Mª José Fernández, Érica Valle, Rocío López, Miguel Benítez, Miriam Rivero, Irene Alemany, Sara Bernal, Nuria Guillén, Natalia Monterroso, Inés Caballero, Fernando Muñoz, Paula García

Grabación sonora: Nuria Guillén, Joaquín Delgado , Miguel Benítez y Juan Ramírez

Fotos y vídeo del encuentro literario: Antonio Varo Pineda

Transcripción del texto y coordinación: Mª Dolores Ansio Aguilera

Otro gran maestro fue Vicente Aleixandre. En la primera visita a Vicente Aleixandre, cuando yo tenía veintidós años (él era siete años mayor que mi padre) y el primer día me dijo: “A ver, Antoñito, léeme alguno de los poemas que tienes por ahí”. Empiezo a leer con mi “granaíno” de Albolote y de pronto dice: “¡Qué horror!, Carlos, por favor, enséñale a leer.” Yo es que he pasado por esas…

Pero he tenido mucha suerte porque aparte de los conocimientos críticos e históricos que Carlos Villarreal me transmitió, también los poetas mayores me quisieron siempre. Conocí a Elena Martín Vivaldi (de la misma edad que mi madre) y aprendí de ella, entre otras cosas, la humildad y recibí su apoyo.

José Muñoz Rojas fue otro gran amigo y maestro que ganó el Premio Nacional de Literatura superándome a mí por un voto. Con José Hierro tuve también largas parrafadas sobre métrica…

Con los de mi edad tengo relaciones de cortesía y de buena educación con algunos de "Los Novísimos". Pero los que me gustaban de verdad o han muerto o están “condenados” en otro idioma o en otra comunidad autónoma y es que parece que con las autonomías hemos trazado unas barreras de incomunicación… Antes estábamos más unidos que ahora. Mi amigo Manolo Vilanova, que es un poeta estupendo (que escribe el gallego y en español), como es gallego y escribe en gallego ya no pasa al resto de España…

- Rocío López Aguilar: Usted considera su poesía como “Defensa y afirmación de la vida, renuncia y rechazo del mal”. ¿Es la ética un elemento esencial en su obra literaria?

Si hay alguna ética en mi obra es como consecuencia de mi práctica vital cotidiana. No entiendo disociada la producción literaria del resto de los actos diarios. Es una necesidad. No le doy más importancia al hecho de escribir poemas. No he concebido nunca la poesía como un medio de proyección social. Los premios me los han dado, yo no he concursado. Es una cosa rara… Escribo por necesidad. Si tengo que decir una cosa, la tengo que decir así y, si puedo, sin marca de género. Lo he aprendido de Garcilaso y de Góngora, para que mi poema sea asentible por el mayor número de lectores.

A mí se me ha señalado con que tengo un fuerte componente moral en la poesía. Supongo que será la consecuencia de mi práctica moral en la vida. Procuro no hacer daño a nadie, tampoco me gusta que me lo hagan. Procuro aliviar los sufrimientos: “No hagas a otro lo que no deseas que te hagan a ti.” Kant dejó una norma estupenda: “Obra de manera que tus actos sirvan de ejemplo a los demás.” Por tanto, si he obrado mal es por equivocación, no porque tenga conciencia de ello. Eso se traslada a mis versos, no puedo disociar mi vida de mi obra.


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