mayo de 2019
Número 7
La promesa de Penélope
Me he acostumbrado a habitar en tu vacío,
se me hacen familiares las ausencias.
La huella de tus besos y tus manos
resuena en mi piel como un eco.
Trenzo certidumbres y promesas
y deshago, al amanecer, mis razones.
El horizonte no anuncia tu vuelta.
La esperanza golpea, inútil, el puerto.
Romper el telar. Escribirte una esquela.
Suicidarme en tu olor, aún preso en mi pelo.
Hacerme al mar. Convertirme en sirena.
No poner en mi voz ningún nombre de nuevo.
ISSN: 1988-9607 | Redacción | www.iesseneca.net |