mayo de 2007
número 0
Eva Mª Redondo Écija
Profesora de Lengua Castellana y Literatura
Los días 27, 28 y 29 de marzo celebramos en el Instituto la quinta edición de nuestra carrera de relevos, que se prolongó este año durante 2007 minutos.
Yo he tenido la suerte de participar en cuatro experiencias magníficas en los últimos tres años : dos carreras en los años 2005 y 2007, con la lectura ininterrumpida del Quijote en la primera, el Camino de Santiago en 2006 y la ruta de senderismo por Trassierra en febrero pasado.
Conocía la realidad escolar de otros centros y, la verdad, me pareció admirable una iniciativa tan compleja y novedosa que tenía la virtud de implicar a muchos miembros del claustro de profesores y a todo el alumnado.
Que la tarea de los centros educativos ha cambiado en los últimos años es innegable. Aunque podemos sentirnos privilegiados por el tipo de alumnado que, en general, tenemos, el mundo de intereses y las actitudes de los jóvenes de hoy distan enormemente de las del pasado. La familia y la sociedad reclaman del sistema educativo una respuesta que no podemos dar sólo desde las aulas. Y,en este contexto, la carrera se convierte en una oportunidad muy importante para conocer a los alumnos en otro ámbito, para comunicarnos con ellos con otros códigos y para transmitirles otro tipo de enseñanzas.
Una actividad como ésta nos obliga a trabajar conjuntamente, a prepararnos físicamente no para ganar, sino para resistir, para contribuir con el esfuerzo personal al logro de un objetivo de grupo. El número y la variedad de participantes imponen el sometimiento a una disciplina en la que tenemos libertad para proponer cambios e ideas que, si son factibles, se incorporan rápidamente, de manera que aunque, como siempre, en el origen hay un individuo, el resultado final es la obra de un equipo.
Renunciar al éxito y reconocimiento personales a favor de un grupo no es ninguna bagatela en una sociedad individualista y hedonista como la que vivimos. Es un ejercicio de solidaridad y compañerismo que nos acerca de manera irremediable al otro, que nos permite ejercitar nuestra capacidad de empatía.
La vivencia y la enseñanza que procede de la experimentación son imborrables y forjan el carácter del individuo y también del Centro. Esto nos permite ir poco a poco afianzando una serie de valores y actitudes, que ya se han reflejado en el éxito de otras iniciativas difíciles de realizar sin estas experiencias: 120 km. de Camino Jacobeo con casi 500 alumnos en duras condiciones y 30 km. en una ruta de senderismo a Sta. Mª de Trassierra con 700 alumnos bajo una lluvia pertinaz.
Pero si de las cifras del conjunto resultan datos llamativos, los logros individuales son de la misma intensidad. Cada alumno se siente, porque lo es, parte insustituible de un engranaje que funciona casi perfectamente (la realización de algunas figuras de la exhibición gimnástica requiere un importante ejercicio de concentración y coordinación entre 800 personas). El resultado final de esta implicación personal y afectiva es el abrazo, la disculpa comprensiva del error, la ayuda si es necesaria porque también “me puede pasar a mí”, la mejora de la autoestima y el orgullo de pertenencia a un lugar.
Casi anecdóticamente podemos constatar también que durante todo el proceso las faltas disciplinarias descienden en el Centro de forma significativa y muchos alumnos, que en las aulas ordinarias se niegan a colaborar con el sistema, en esos días trabajan incansablemente, eso sí, en tareas distintas a las habituales. ¿Un motivo para la reflexión?
A las aportaciones de los profesores, departamentos y colaboradores, al entusiasmo y al apoyo sin fisuras de algunos , y por encima de todo al trabajo, la ilusión y la fe de Antonio Bravo, les debo la suerte inmensa de haber disfrutado de “las Carreras del Séneca”.
NO ES SOLO UNA CARRERA Antonio Bravo Bueno |
DISCURSO DE LOS ALUMNOS DE BACHILLERATO EN EL ACTO INAUGURAL |
UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE María Jiménez Pizarro |
EL DIRECTOR DE UNA ENORME ORQUESTA Mª Dolores Ansio |
MI PRIMERA CARRERA Javier Martínez Moreno |
LO QUE YO PENSÉ Ángel Ortiz González |
EL ESPÍRITU "OLÍMPICO" SE ADUEÑA DEL I.E.S. SÉNECA José Mª de la Torre |
ISSN: 1988-9607 | Redacción | www.iesseneca.net |